El poder de estar presente
Hoy en día es muy común escuchar a las personas hablar sobre la consciencia y referirse a esta desde cualquier ámbito, en el personal, empresarial, académico, etc. La consciencia parece tener un lugar reservado en la tarima de muchos escenarios. Según la RAE, la consciencia es “la capacidad del ser de reconocer la realidad circundante y de relacionarse con ella”. acorde a esta definición podemos hacer una reflexión o cuestionarnos de manera individual. ¿Tengo la capacidad de estar atento a mi entorno y lo que sucede en este? Parece una pregunta simple pero muy profunda, y es que, si pensamos en una respuesta a la ligera, tal vez exclamemos un atrevido “Si, obvio”, pero la profundidad de la pregunta tiene que ver no con buscar y responder hacia afuera, si no hacia adentro, a nosotros mismos, porque aquí estamos cuestionando nuestra capacidad de estar en el momento presente y como ello impacta todo aquello con lo que nos conectamos a diario.
Una manera de analizar qué tan conscientes somos desde lo cotidiano, es con sencillos ejemplos, examina tu mañana y responde en tu interior: cuando te sientas a desayunar ¿sientes y disfrutas el sabor de los alimentos o simplemente estas respondiendo a una necesidad fisiológica? ¿tu mente está ahí, en la sensación de cada sabor o está pensando en la maratón que debe iniciar a continuación?, cuando llevas a tu hijo a la escuela ¿disfrutas ese momento juntos como un paseo o lo haces en un afán inexplicable que tal vez no recuerdas algo de las palabras que cruzaron en el camino? Si tus respuestas anteriores te hacen sentir desconectado del momento, tal vez estás viviendo una vida en “piloto automático”, expresión muy usada hoy en día para describir aquellos momentos en los que simplemente estamos reaccionando a estímulos sin ningún control de nuestra atención.
Si reflexionamos de igual manera en un contexto laboral, donde nuestros propósitos o nuestro trabajo diario busca impactar de manera positiva la vida de otras personas, ¿Cómo lo estamos haciendo? ¿Cómo vive cada persona de nuestros equipos? ¿tomamos decisiones en un ambiente perturbado o consciente? Y aquí toma un gran valor EL PODER DE ESTAR PRESENTE. Este sí que es un súper poder que deberíamos incentivar y motivar en nuestros equipos de trabajo, es la mejor inversión que como líderes podemos hacer. Estar presente tiene que ver con la capacidad de enfocar la atención plena en lo que sucede en el entorno, como lo interpreto y como tomo acción enfocada. Un sencillo ejemplo es cuando debes atender una reunión, si todos los involucrados están con la atención plena en el momento, seguro se tomarán mejores decisiones. Ahora mismo muchas de nuestras acciones tienen impactos que pueden transformar la realidad, asi que piensa en los resultados cuando lo haces enfocado y cuando no.
Finalmente, si buscas que tu vida sea mejor, que tú y tu equipo de trabajo tengan resultados extraordinarios, empieza por recuperar la atención de ese entorno demandante e hiperconectado en el cual vivimos hoy. Un simple ejercicio como hacer consciencia de tu respiración antes de iniciar cada tarea puede cambiar los resultados, haz la pausa, cierra los ojos y dirige tu atención al movimiento de la respiración. Si nos permitimos estar en el momento presente, podremos sentir cosas maravillosas, podemos apagar el entorno y enfocar nuestra energía. De lo contrario, seguiremos luchando en nuestro interior por entender cómo hacer cada cosa de mejor manera en el día a día e involucrando nuestra atención en una competencia innecesaria.
Carlos Serna. CEO – CINNCO / ARMONNICO
